En el apartado eléctrico en la vivienda, hay muchos arreglos que podemos hacer nosotros mismos en casa sin necesidad de tener que contratar a un electricista. Obviamente se trata de arreglos pequeños y que no requieren de muchos conocimientos técnicos.
Os mostramos algunos consejos para evitar problemas eléctricos en casa.
Hay que mantener los aparatos eléctricos alejados del agua y la humedad. En caso de que un aparato conectado caiga al agua, no intentes recuperarlo o desconectarlo. Ve al cuadro eléctrico de la casa, corta la luz y una vez que el aparato esté completamente seco, contacta con un electricista.
Si los electrodomésticos hacen ruidos extraños o hacen saltar el circuito eléctrico de manera repetida, no es casualidad. Para evitar problemas eléctricos mayores, desconecta ese aparato y contacta con un electricista para que lo inspeccione.
Son interruptores y enchufes que en caso de haber peligro, se desconectan de la electricidad, de ese modo se evitan las descargas eléctricas y las quemaduras.
Si los fusibles e interruptores no son del tamaño y la potencia adecuada, van a terminar fallando. Asegúrate de instalar estos elementos en su tamaño y potencia correcta.
Este consejo va más encaminado a aquellas personas con niños en casa. Con tapas en los enchufes se evitan riesgos innecesarios, como que los bebés intenten meter sus dedos en los agujeros de los enchufes y otros objetos.
Si hay enchufes que no tienen placas, colócalas, es el mejor modo de evitar problemas eléctricos. Las placas no son elementos estéticos, sino que son un elemento de seguridad.
Los multiplicadores o ladrones son muy útiles para conectar varios electrodomésticos en la misma toma, pero es también un modo de sobrecargar el circuito eléctrico o recalentar los cables.
Para evitar problemas eléctricos, no abuses de estos multiplicadores, coloca sólo los necesarios.
Si vas a trabajar en el jardín con electrodomésticos y ha llovido o están húmedos o mojados, no los utilices hasta que estén completamente secos, y nunca los dejes conectados.
Cuando tengas que comprar bombillas, elige aquellos modelos que sean de igual o menor potencia que la máxima recomendada. Una bombilla de alta potencia va a ocasiones problemas eléctricos como sobrecargas en el cableado e incluso incendios.
Mantener los cables en buen estado y comprobar de manera periódica que no se quedan atrapados bajo los muebles es el último de los consejos para evitar problemas eléctricos.
Una presión excesiva de los cables de alimentación puede dañar el aislamiento o comprimir el hilo conductor, algo que se traduce en un sobrecalentamiento.